¿Hasta cuando podremos Soportar la caída de las Hojas en otoño?
¿Por qué cae la lluvia Anunciando el arribo del Invierno frío, gélido?
¿Vendrá la primavera Con flores y frutos, Devolviéndonos esperanza?
¿Donde está la sonrisa De Dios, el cielo alegre Del verano?
Poema Ajeno -
Hoy es un día triste… No por la guerra Que asola el Mundo, No por el hambre Que domina la pobreza, No por la muerte Que aguarda a cada esquina. Egoísta de mi, Soy yo quien posee Guerra en mi interior, Hambre en mis labios Y Muerte en mi corazón.
Hoy es un día triste… Como todos los demás, Cada día muero, Cada día me animo a vivir, Anhelando mis carencias Vomitando mis excesos. Ya no tengo esperanza, Se me gastó por el camino, Me acabó el desaliento De tantos amores perdidos, ¿Por qué vivo, si vivo ya estoy muerto?
Hoy es un día triste… Ya no oigo cantar. Ni sonrisas en el mar, Ni estrellas en el cielo, Nadie puede darme lo que quiero. Tristes son los días, Pasan oscuros y quejumbrosos, Cansados como mis ojos. Ya debía estar acostumbrado, A los golpes de la vida, Debía saber recibirlos, De frente o de costado. Pero nunca estoy atento, Siempre me pillan despistado, Son sus ojos, Es su boca, Es su pelo, Sus manos Y sus besos… Que me ciegan, Me despistan Y me aturden, Creyéndome en el Cielo, Engañado hacia el Averno.
Hoy es un día triste… En el que lloro sin motivos, Porque motivos no tengo Ni para morir Ni para vivir… No tengo nada. Sólo sentimientos, Profundos y ocultos sentimientos. Amor y Odio, Tristeza y Alegría, Hastío y Esperanza. Soy una contraposición, A mi mismo me cuestiono, No se darme la razón, Y quitármela no puedo, Sólo esperar… Maldito tiempo. No tengo respuestas Y las preguntas suenan desgastadas. Han sido tantas veces… Tantas historias… Tantas noches en vela… Tantas negativas a vivir… Tantas incógnitas… Ha sido tanto de todo, Que si no lo estoy, Pronto me volveré loco. Y no me preocupa Que me pueda quedar solo, Porque solo… En cierto modo Ya estoy.
Annelise
En 1968, con 16 años, Anneliese comenzó a padecer extraños ataques y se le diagnosticó epilepsia. Permaneció ingresada en el hospital psiquiátrico de Würzburg. Cuando salió, fue capaz de completar sus estudios de bachillerato y matricularse, en 1973, en la Universidad de Würzburg.
Sin embargo, durante todo este tiempo Anneliese aseguró escuchar voces de ultratumba y ver visiones demoníacas que atribuyó a una posesión infernal. Los médicos que la atendieron no encontraron paliativos ni una explicación satisfactoria a los padecimientos de la joven, los padres católicos optaron por pensar que su hija, en efecto, estaba poseída. Se dice que los mismos demonios no le permitían comer; eso le provoco una terrible